Una de las épocas más brillantes de la historia de Boca tuvo a Palermo, como no podía ser de otra manera, siendo protagonista clave.
La primera etapa de Carlos Bianchi ganando todo comenzó con el "Optimista del gol" marcando 20 goles en 19 partidos del Apertura '98 y terminó con estos dos tantos en Tokio el 28 de noviembre de 2000.
En apenas cinco minutos, Palermo ya le había marcado un doblete al temible Real Madrid de Figo, Raúl, etc. Esa noche, hasta el árbitro colombiano Oscar Ruiz cuenta que lo felicitó. No era para menos, Martín se estaba inscribiendo en las páginas más brillantes de la historia.
0-1 con Jamaica en Mar del Plata y, la verdad, un resultado más que preocupante a pocos meses del Mundial. Sin embargo, Palermo, Palermo señores, apareció una vez más para salvar las papas y empardar.
Un golazo, cabezazo desde la puerta del área. Fenomenal. El "Loco", definitivamente, se merece estar en el Mundial.Fue su séptimo gol con la "Celeste y Blanca", en sólo 12 partidos...
Es hora señores. Desde nuestro humilde lugar en el mundo (Posadas, Misiones), empezamos la campaña más importante del año: lograr que Martín Palermo vaya al mundial de Sudáfrica 2010.
Razones sobran, momentos históricos de este goleador épico hay para tirar al techo. Pero los iremos recorriendo hasta el momento en que Diego Maradona finalmente decida que uno de los 23 en Sudáfrica sea el increíble titán.
Para empezar, un golcito... Uno sin el cual, quizás no hubiese habido mundial para Argentina...
Con este gol, Argentina le ganó agónicamente a Perú en la penúltima fecha de las Eliminatorias y consiguió tres puntos de oro. El tanto borró, para siempre, la mancha de los tres penales.